Los jueces del Tribunal de Juicio de Mercedes no coincidieron con el pedido de 35 años de cárcel que había pedido la Fiscalía. Para ellos, Aldana Muñoz sufrió un trastorno mental transitorio incompleto, que afectó su capacidad de comprender la criminalidad del acto.
El Tribunal de Juicio de Mercedes condenó a la pena de 20 años de prisión a Aldana Muñoz, la mujer que en noviembre de 2023 asesinó a sus hijos de ocho y cinco años en la localidad correntina de Curuzú Cuatiá.
El tribunal, compuesto por los jueces Héctor Troncoso (presidente), César Muschietti y Guillermo Ríos, resolvió por unanimidad aplicar una pena significativamente menor a la solicitada por la Fiscalía, que había pedido 35 años de prisión. La defensa, a cargo de la doctora Julieta Lacroze, había solicitado una condena de ocho años.
Durante la lectura del veredicto, el juez Troncoso explicó que se tuvieron en cuenta elementos determinantes del estado psíquico de la acusada al momento del crimen. En particular, se valoró el diagnóstico de trastorno mental transitorio incompleto, lo que habría afectado su capacidad de comprender la criminalidad del acto, descartando que se haya tratado de un hecho “premeditado y a sangre fría”.
Uno de los aspectos centrales del fallo fue el análisis del contexto en que se cometió el crimen. El tribunal señaló que Muñoz había manifestado de forma reiterada su voluntad de quitarse la vida, lo que derivó en el asesinato de sus hijos en lo que se calificó como un homicidio “altruista”, bajo una conciencia alterada y dominada por una idea delirante.

“No hemos tenido todas las herramientas que se podrían haber tenido para resolver un caso tan complejo”, advirtió Troncoso al cuestionar la falta de un informe socioambiental, aunque aclaró que el tribunal pudo suplir esa ausencia mediante diversos testimonios presentados en el juicio.
Además, el fallo subrayó que Muñoz no intentó ocultar los hechos, que carece de antecedentes penales y que sus condiciones de vida eran precarias. “Hoy Muñoz está consciente, todos los profesionales de la salud mental que la han examinado dieron cuenta de que posee su juicio conservado. Lo que implica una pena natural que la va a acompañar toda su vida”, sostuvo el magistrado.
Según fuentes del caso, la imputada seguirá alojada en la Unidad Penal N°10 del Servicio Penitenciario Provincial, en el área de seguridad del Hospital de Salud Mental “San Francisco de Asís”. El tribunal informó que los fundamentos completos del fallo serán dados a conocer en el plazo de cinco días hábiles.
El hecho ocurrió en el barrio Santa Rosa de Curuzú Cuatiá. Según la reconstrucción, Muñoz mató a sus hijos, Sofía (5) y Dylan (8), mientras dormían. Poco después, fue hallada por su hermana, Luana Muñoz, quien ingresó a la vivienda tras días sin tener contacto con ella. Encontró a Aldana con la ropa ensangrentada y repitiendo en voz baja que no hiciera ruido porque “los niños dormían”.
En la escena del crimen también se encontraron dos bolsas con pertenencias de Maciel, lo que para la defensa refleja un contexto emocional devastador. “Él la había engañado, se había ido a vivir con su madre, pero no quería irse de la casa”, explicó su abogada Julieta Lacroze.
La abogada hizo hincapié en que la noche anterior al hecho, la pareja había mantenido una discusión intensa por WhatsApp y que tres semanas antes, Muñoz había sido internada por un ataque de nervios tras otra pelea con Maciel. “Todo indica que no fue una discusión más”, dijo.