El presidente del Colegio Público de la Abogacía porteño Ricardo Gil Lavedra advirtió sobre el impacto del comportamiento judicial en la imagen del Poder Judicial y reclamó mayor rigor ético tras los hechos recientes en el juicio por la muerte de Diego Maradona.
La jueza Julieta Makintach fue apartada del juicio por la muerte de Diego Maradona tras revelarse su participación en un documental no autorizado titulado Justicia Divina, que incluía grabaciones dentro del tribunal y declaraciones suyas que comprometían su imparcialidad. El escándalo, que incluyó el ingreso irregular de una amiga documentalista al edificio judicial, llevó a la suspensión del proceso y puso en duda su validez.
Lo que importa
Makintach negó haber cometido delitos, pero su conducta generó denuncias por mal desempeño y su suspensión como docente en la Universidad Austral. El futuro del juicio, que involucra a siete profesionales de la salud acusados por la muerte del ex futbolista, permanece incierto.
Al ser consultado al respecto, Ricardo Gil Lavedra, presidente del Colegio Público de la Abogacía de la Capital Federal, afirmó que “el reciente escándalo suscitado durante la realización del juicio por la muerte de Diego Armando Maradona, evidencia la necesidad de que los jueces ajusten su comportamiento a estrictas reglas éticas”.
Contexto
El juicio por la muerte del astro futbolístico, fallecido en 2020, investiga responsabilidades penales del equipo médico que lo atendía. En ese marco, la difusión de comportamientos indebidos por parte de algunos magistrados provocó una ola de críticas en medios y redes sociales. La reacción de Gil Lavedra apunta a contener ese daño simbólico.
“El deterioro de la imagen de la Justicia recibió un duro golpe”, aseguró el reconocido jurista, y añadió: “No sólo las abogadas y abogados debemos cumplir con normas éticas; la Justicia, a través de su accionar, debe demostrar su imparcialidad, objetividad y neutralidad”.
Gil Lavedra, quien se destacó como juez en el histórico juicio a las Juntas de la última dictadura, recordó además que “debido a la función jurisdiccional que desempeñan, los jueces deben ser los primeros en respetar los más altos estándares éticos y evitar cualquier tipo de inconducta, tanto en su vida privada como pública”.
Cómo sigue
Desde el Colegio Público de la Abogacía porteño se hizo un llamado explícito a recomponer el vínculo entre el sistema judicial y la ciudadanía. “Hacemos un llamado a todos quienes formamos parte del sistema de justicia para seguir trabajando juntos en pos de robustecer la confianza de la sociedad en el Poder Judicial”, concluyó Gil Lavedra.
