La Cámara Federal de San Martín rechazó objeciones de la defensa del magistrado contra el contenido del requerimiento de elevación a juicio de la fiscalía en la investigación por la desaparición de 144 monedas de oro que estaban bajo custodia de un juzgado de San Isidro en una caja de seguridad bancaria.
Martín Poderti progresó en su carrera y dejó San Isidro para jurar como juez de un Tribunal Oral Federal de Mar del Plata y luego estalló el escándalo que en breve lo tendrá en el banquillo de los acusados: se descubrió que las 144 monedas de oro habían desaparecido y se comprobaron reiterados ingresos al sector de cajas de seguridad del Banco cuando aún era secretario en el juzgado de ese partido del conurbano norte.
El juez también está en la mira del Consejo de la Magistratura y tiene procesamiento confirmado por la Cámara Federal de Casación.
La justicia de San Isidro comenzó el camino para el envío a debate oral. La fiscalía formuló su requerimiento de elevación a juicio y esa acusación resultó objetada por la defensa.
Pero ahora la Cámara Federal de San Martín rechazó los planteos.
«Se aprecia que la defensa de Poderti no ha logrado demostrar que el dictamen fiscal resulte desajustado a las exigencias del Art. 347, del CPPN y tampoco que se haya afectado el derecho de defensa ni el debido proceso legal».
Sobre el futuro juicio oral, los jueces Alberto Lugones y Néstor Barral remarcaron que «no es posible soslayar el inminente avance de la pesquisa hacia la etapa plenaria, instancia idónea donde –con la amplitud que ella propone-, podrán analizarse y debatirse los extremos que aquí se plantean».
Y descartaron que la fiscalía haya actuado con alguna «actividad suspicaz» como argumentó la defensa.
«No se vislumbran elementos que permitan siquiera presumir –del modo que pretende el apelante- la existencia de una actividad suspicaz emprendida por el fiscal instructor en detrimento del causante y su asistencia letrada en pos de su ejercicio de derecho de defensa», concluyeron los jueces.

El secretario y las monedas desaparecidas
Poderti está procesado por el delito de malversación de caudales públicos. Se le imputa haber ingresado en 19 ocasiones, entre diciembre de 2019 y febrero de 2023, a la caja de seguridad del Banco Nación sucursal San Isidro donde se encontraban resguardadas las monedas -muchas de ellas de alto valor numismático- secuestradas en una causa por narcotráfico, incluso en fechas en las que se encontraba formalmente de licencia.
El hecho tomó estado público en abril de 2023, cuando se advirtió la desaparición del oro, que debía ser devuelto por orden judicial tras la absolución del imputado original, que ahora es querellante en la causa penal. La investigación reconstruyó las visitas de Poderti al banco, algunas de ellas cuando ya había iniciado trámites para dejar su cargo como secretario del Juzgado Federal 2 de San Isidro.
En su defensa, el magistrado sostuvo que usaba la caja para almacenar objetos y documentos del juzgado y atribuyó la falta a desmanejos anteriores. Sin embargo, tanto el juez de primera instancia como la Cámara Federal de San Martín desestimaron su explicación por considerar que no contradecía la sólida prueba en su contra.
El faltante de las monedas de oro se detectó el 9 de abril de 2024, cuando Poderti ya era juez del tribunal oral federal de Mar del Plata. La situación es inédita en la justicia federal argentina.
