Marcos Adrián Abrebanel fue sentenciado a cuatro años y seis meses de cárcel y no podrá volver a ejercer su profesión. La condena fue por abusar de dos jóvenes, una de ellas menor de edad.
En un juicio abreviado, el odontólogo salteño Marcos Adrián Abrebanel, de 41 años, fue condenado este jueves a la pena de cuatro años y seis meses de prisión efectiva y a la inhabilitación especial perpetua para ejercer su profesión, tras ser hallado culpable de abuso sexual simple en concurso real con abuso sexual gravemente ultrajante contra dos víctimas.
La audiencia estuvo a cargo del juez Maximiliano Troyano, vocal de la Sala IV del Tribunal de Juicio de Salta, quien además ordenó el traslado del condenado a la Unidad Carcelaria 1, la extracción de muestras de ADN para su incorporación al Banco de Datos Genéticos, y que el imputado reciba atención terapéutica, en función de la naturaleza de los delitos cometidos.
Los hechos acreditados en la sentencia incluyen abusos cometidos contra una adolescente de 15 años al momento de los hechos, y una joven de 20 años, en distintos episodios y modalidades. En el primer caso, se lo condenó por abuso sexual simple en concurso real con abuso sexual gravemente ultrajante; en el segundo, por abuso sexual simple continuado también en concurso real con abuso sexual gravemente ultrajante.
Durante el proceso, el juez homologó un acuerdo por el cual el odontólogo deberá abonar 36 millones de pesos a una de las víctimas, en concepto de reparación del daño. La otra denunciante optó por continuar su reclamo por la vía civil.
El procedimiento abreviado fue convalidado por la fiscalía, la defensa y la parte querellante. El magistrado verificó la legalidad del acuerdo y la proporcionalidad de la pena, antes de proceder a su homologación. El propio imputado reconoció los hechos y aceptó los términos del acuerdo.
La causa fue impulsada por el fiscal Federico Obeid, mientras que en la defensa actuaron Oscar Alejandro Romani y Guillermo Mauricio Alberto. En representación de la parte querellante participó el abogado Luciano Romano.
Por último, se informó a ambas víctimas que tendrán derecho a ser notificadas en caso de que el condenado solicite beneficios carcelarios durante la ejecución de la pena.
