Con la dirección del juez federal Ricardo Ángel Basilico, se presentó un comentario integral y operativo del Código Procesal Penal Federal que ofrece criterios prácticos, mirada federal y lineamientos para la implementación real del nuevo modelo adversarial en todo el país.
En un momento en que el sistema judicial argentino atraviesa una transición decisiva hacia un modelo acusatorio pleno, se presentó una obra que busca convertirse en referencia ineludible para quienes litigan, juzgan, investigan o estudian el derecho penal federal. Se trata de un comentario integral y operativo del Código Procesal Penal Federal, concebido como herramienta práctica para la implementación real del nuevo proceso adversarial.
Dirigida por el Dr. Ricardo Ángel Basilico y coordinada por los Dres. Federico Nicolás De Florio y Mariano Nicolás Lema, la obra reúne a un destacado equipo de autores de diversas jurisdicciones, aportando una mirada genuinamente federal. Entre ellos, Santiago Alberdi, Diego Arce, Luciano Casal, Tomás Edison Fratto, Fidel González, Santiago Luis González, Hugo Horacio Greca, Santiago Martín Iglesias, Patricia Mallo, Guido Ernesto Manfredi, Noelia Matalone, Leónidas Moldes, Maximiliano Murguía, Maximiliano Nicolás, Sofía Piergentili, Nicolás Sarmiento, Pablo Sebastián Tello y Jorge Villada. Colaboran también Federico Tavarozzi y Maximiliano Villada.
Un enfoque para “construir lo nuevo”
El libro parte de una premisa central: el proceso acusatorio no puede edificarse arrastrando lógicas del modelo mixto. Para ello, ofrece criterios verificables, secuencias de actuación y soluciones prácticas orientadas a la litigación cotidiana.
Su estructura sigue el propio recorrido procesal -principios generales, etapa preparatoria, control de la acusación, juicio, procedimientos especiales, impugnaciones, ejecución y actos de fuerzas armadas- permitiendo que el lector pueda ubicarse rápidamente en cada tramo y resolver problemas concretos con respaldo normativo y doctrinario.
El rediseño institucional, condición de posibilidad
La obra dedica especial atención a los cambios estructurales que demanda el sistema adversarial: Colegios de jueces por funciones, Oficinas judiciales para la gestión transparente de audiencias, Desconcentración administrativa de magistraturas, y una organización orientada a la eficacia sin sacrificar garantías.
No se trata sólo de reglas procesales: la implementación territorial y orgánica del sistema es presentada como la clave para que la oralidad, la inmediación y la simplicidad procesal sucedan realmente.
Ministerio Público Fiscal, víctima y crimen organizado
Otro aporte relevante es el análisis de la actuación del Ministerio Público Fiscal en clave de coordinación y especialización, especialmente frente a delitos complejos y Criminalidad Organizada Trasnacional. Se abordan pautas para investigaciones multijurisdiccionales y técnicas especiales de investigación, consolidando a la obra como un instrumento legal y procesal de alto impacto operativo.
Asimismo, el texto destaca el retorno del protagonismo de la víctima, que recupera su rol de parte activa en el proceso. La oralidad, por su parte, devuelve al juez al centro del conflicto real: “el juez resuelve personas, no expedientes”.
Una herramienta para decidir casos
El comentario no se limita a explicar artículos: incorpora criterios sobre invalidez de actos desde un enfoque antiformalista, cooperación internacional y participación ciudadana, siempre orientado a la práctica y la toma de decisiones en audiencias.
El respaldo bibliográfico y comparado permite una lectura plural, actualizada y en diálogo con experiencias provinciales y extranjeras, atendiendo a la identidad propia del Código Procesal Penal Federal.
En síntesis, la obra busca contribuir a la constitucionalización del proceso penal federal (artículo 120 CN), promoviendo una justicia más racional, accesible y legítima. Su vocación es clara: ser una herramienta útil para magistraturas, Ministerio Público Fiscal, defensa, querellas, fuerzas auxiliares y comunidad académica. No para describir el derecho, sino para resolver casos en el nuevo paradigma procesal argentino.
