La jueza federal María Eugenia Capuchetti destacó el impacto del mensaje del Papa Francisco, subrayando su llamado a “humanizar la justicia”, combatir el crimen organizado y poner en el centro las problemáticas que afectan a los más vulnerables.
La jueza federal María Eugenia Capuchetti recordó el encuentro que mantuvo el año pasado con el Papa Francisco en el Vaticano, junto a los jueces Mariano Borinsky y Daniel Petrone.
Para Capuchetti, el momento fue de “profunda reflexión y conexión humana”, y destacó que el Papa “nos recordó la importancia de humanizar la justicia y no convertirla en un mero mecanismo impersonal”. Estas palabras no sólo interpelan a quienes integran el Poder Judicial, sino que trazan un horizonte de trabajo con foco en los sectores más vulnerables y en la necesidad de instituciones más solidarias.
A lo que añadió: “Era innegable su cercanía a las problemáticas sociales de América Latina y en ese sentido nos manifestó su compromiso con la actualidad judicial de nuestro país, interesándose por la reforma del Código Penal, exponiendo su preocupación por la situación de las personas privadas de la libertad, la necesidad de combatir con eficacia y celeridad el crimen organizado, el narcotráfico, la corrupción y demás cuestiones de interés social. Nos recordó la importancia de humanizar la justicia y no convertirla en un mero mecanismo impersonal, como también la necesidad de concientizar a los magistrados del deber que tenemos a nuestro cargo. Su insistencia en que ‘sin justicia no hay paz’ nos interpela a trabajar activamente por sociedades más inclusivas y solidarias”.
