Guillermo Berjeli, de 46 años, será juzgado a partir del 17 de marzo por el delito de homicidio cuádruplemente agravado por el vínculo, por haber sido cometido con alevosía, por el suministro de veneno y por codicia, que prevé como única pena la prisión perpetua.
El juicio oral y público contra Guillermo Berjeli (46), el podólogo acusado de envenenar a su esposo en el sanatorio Anchorena del barrio porteño de Recoleta, comenzará el 17 de marzo próximo y contará de ocho audiencias.
El debate estará a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional (TOCC) Nº5 de la Ciudad de Buenos Aires, que preside la jueza Cinthia Oberlander y está integrado por Adrián Pérez Lance y Juan Manuel Grangeat. Como representante del Ministerio Público Fiscal estará el fiscal general Juan Manuel Fernández Buzzi.
En principio, las audiencias fueron previstas para los días 17 y 19 de marzo, 7 y 9 de abril y 5, 7, 26 y 28 de mayo próximos.
Berjeli, quien actualmente se encuentra alojado en el Complejo Penitenciario Federal I de Ezeiza, será juzgado por el delito de homicidio cuádruplemente agravado por el vínculo, por haber sido cometido con alevosía, por el suministro de veneno y por codicia, que prevé como única pena la prisión perpetua.
Según la instrucción, el acusado mató a su cónyuge, Roberto Alfonso Aquiles Guzmán Jaque (58), un ciudadano de nacionalidad chilena que trabajaba como empleado del servicio de atención telefónica de una aerolínea estadounidense.
La pareja se casó el 16 de septiembre de 2019. Se habían conocido a través de una aplicación de citas para gays y vivieron juntos en el barrio de Villa Crespo hasta el 16 de diciembre de 2019, cuando la víctima sufrió una descompensación que derivó en su internación.
Guzmán Jaque ingresó en el Sanatorio Anchorena con un cuadro de deterioro del sensorio, insuficiencia renal, desorientación, trastorno en la marcha y alteración en el habla. Tras permanecer internado durante 27 días en la cama 11 de la sala 100 de terapia intensiva, el 12 de enero de 2020 finalmente se produjo su deceso.
Según la acusación, en los días de internación el podólogo habría manipulado o intercambiado al menos trece veces los sueros de su esposo por bolsas que traía en una mochila.
Matar por codicia
En el requerimiento de elevación a juicio, el fiscal Pablo Recchini -a cargo de la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N°44-, señaló que la prueba es categórica. «Berjeli manipuló los baxter y las válvulas de dichos sueros del Sanatorio Anchorena, sin que la defensa haya podido explicar por qué el imputado desplegó dichas maniobras, obteniendo como resultado de dicho accionar la muerte de Guzmán», acusó el fiscal.
Para Recchini el móvil del crimen fue económico. «La finalidad era cobrar su seguro de vida de Metlife, por el que efectivamente percibió la suma de 68.750 pesos el 2 de abril de 2020 en su cuenta bancaria; y, a su vez, con el objeto de heredar los bienes que aquél poseía en la República de Chile».