El proceso en Salta contra el líder de Generación Zoe y otros cuatro imputados por estafas reiteradas y asociación ilícita fue reprogramado para el miércoles 4 de junio. En la audiencia de hoy, el acusado revocó el poder de la defensora oficial y pidió un abogado particular.
El inicio del juicio oral y público contra Leonardo Cositorto, fundador de Generación Zoe, fue postergado hasta el próximo miércoles 4 de junio debido a un cambio en su representación legal.
La decisión fue adoptada esta mañana por los jueces de la Sala I del Tribunal de Juicio de Salta, quienes decidieron reprogramar la audiencia tras la presentación del imputado revocando el poder de la defensora oficial y solicitando la designación de un abogado particular, el doctor Franco Rodolfo Tolaba.
En la causa también están imputados Ricardo Gabriel Isaac Vilardel, Jorge Federico Vilardel, Ana Lucía de los Ángeles Vilardel y Vilma Griselda Albornoz, todos acusados junto a Cositorto por los delitos de estafas reiteradas (118 hechos) y asociación ilícita, en concurso real.
La fiscal Ana Inés Salinas Odorisio, titular de la Unidad de Delitos Económicos Complejos (UDEC), está a cargo de la acusación, mientras que la defensa de los otros cuatro imputados será ejercida por el abogado Fernando Díaz Zabalaga.
De acuerdo con la investigación, Generación Zoe funcionaba en Salta bajo un esquema fraudulento de tipo Ponzi, captando a pequeños y medianos inversores mediante promesas de rentabilidad del 7,5% al 10% mensual, lo que equivalía a una ganancia anual del 120%.
Sin embargo, los beneficios ofrecidos no provenían de actividades comerciales genuinas, sino de los aportes de nuevos inversores, lo que terminó afectando gravemente a más de un centenar de personas.
Las denuncias contra la sede salteña de la organización comenzaron a acumularse en 2022, cuando numerosos ahorristas se presentaron ante la justicia denunciando haber sido víctimas de una estafa sistemática.
El juicio busca determinar las responsabilidades penales de Cositorto y sus colaboradores en la maniobra financiera que, bajo un discurso de crecimiento personal y oportunidades económicas, ocultaba un mecanismo de fraude sostenido por la confianza de cientos de damnificados.
Cositorto fue trasladado días atrás desde la cárcel de Goya, Corrientes, donde fue condenado en marzo a 12 años de prisión efectiva por liderar una estructura similar de estafa financiera. Actualmente se encuentra detenido en la Alcaidía General de Salta, bajo custodia del Servicio Penitenciario Provincial.
