“Téngase presente”. Esta ha sido hasta el momento la escueta respuesta de la fiscalía federal de Ramiro González ante una nueva presentación de Fabiola Yañez en la investigación de su denuncia contra el ex presidente de la Nación Alberto Fernández por supuesta violencia de género.
Se trata de copias certificadas de intercambios de mensajes que Fabiola Yañez mantuvo con su ex pareja y padre de su hijo en agosto pasado, poco antes de denunciarlo en Comodoro Py.
«Me dabas sopapos y me dejabas la cara hirviendo», es una de las afirmaciones de ella que más impacta. Se dio en el marco de un intercambio el 3 de agosto último -lo denunció el 6 de ese mes-.
«Dejate de joder. Me hiciste negarle algo a un juez y me pedís que te ayude. Lo planteás como una pelea, pero yo me iba a la casa de huéspedes porque me dabas sopapos y me dejabas la cara hirviendo”, reprocha Yañez en esos intercambios ante un reclamo del ex Presidente.
«Hoy apareció un periodista de Clarín preguntando por las fotos que le mandaste a María. Las tienen. Esto es grave. Ahora aparecieron tus diálogos. Van a contar historias a partir de ahí. Van a venir contra mí”, había escrito él poco antes.
La referencia de Yañez vinculada a «negarle algo a un juez» remite a que poco antes el juez federal Julián Ercolini se había comunicado con ella y mantuvo una audiencia virtual en la cual le preguntó si había sido víctima de violencia de género. Ella respondió que eran peleas habituales y no quiso realizar ninguna denuncia.
El magistrado había encontrado en otra investigación penal, la que busca determinar delitos en la contratación de seguros para organismos oficiales con un broker allegado a Alberto Fernández, mensajes que intercambió la entonces primera dama con la secretaria del ex Presidente, María Cantero .
Cantero es la esposa del broker investigado, Héctor Martínez Sosa.
En esos mensajes que la secretaria privada de Alberto guardó en su cuenta de WhatsApp aparecieron fotos de Yañez con moretones y mensajes donde hablaba de golpes por parte del Presidente.
El hallazgo se dio en el marco de un peritaje al teléfono, secuestrado en la causa por los seguros. Días después y cuando esos mensajes se hicieron públicos, Yañez denunció a Fernández.
El contexto
Fabiola Yañez hizo esta nueva presentación en la fiscalía luego del fracaso de una instancia que se abrió para preservarla y agilizar el trámite de la causa, vinculada a una extracción judicial de la información de su teléfono celular en España, país donde vive en la actualidad con su hijo
El fiscal tramitó y consiguió un exhorto en tiempo récord: una fiscal española esperó dos veces en vano a Yañez para hacer la copia forense de la información de su teléfono y enviarla resguardada a la Argentina. Pero ella no se presentó.
El trámite se cerró y entonces Fabiola envió una nota de puño y letra al fiscal donde le pedía garantías de que sólo se peritarían los mensajes intercambiados con el ex Presidente. González le respondió que estaban dadas desde el principio y la invitó a entregar la prueba.
Panorama
En la causa hay cada vez más evidencia que apunta a un futuro pedido de declaración indagatoria para el imputado ex presidente Alberto Fernández. La investigación está delegada en la fiscalía de González.
Ante este cuadro de situación la semana pasada la defensa de Alberto Fernández recusó al fiscal por presunta pérdida de objetividad en el trato a las partes y pidió al juez Ercolini que lo aparte de la causa.
Ercolini dio ya vista del planteo y una vez terminada esta instancia llamará a una audiencia, de manera previa a decidir. Tiene tres opciones: aparta al fiscal para que se designe a otro, lo confirma o reasume él la pesquisa.
Próximos pasos
En lo inmediato, para este jueves 16 de octubre, está previsto que se presente en el quinto piso de Comodoro Py 2002 como testigo Sofía Pacchi, una ahora ex amiga de Yañez, quien compartió con ella importantes momentos en la residencia presidencial de Olivos, entre ellos la cuestionada fiesta de cumpleaños en plena pandemia en 2020.
El fiscal aguarda también los resultados de medidas de prueba que pidió vinculadas a otros teléfonos, una vez frustrado el exhorto a España.