La Legislatura porteña aprobó una norma por la cual los órganos de la Administración Pública y de los poderes Legislativo y Judicial de la Ciudad al publicitar bienes y servicios como “gratuitos” deberán comunicar que “las erogaciones realizadas son financiadas con recursos provenientes del aporte de los contribuyentes”.
La ley fue impulsada por la diputada de Republicanos Unidos (RU) Marina Kienast y recibió 31 votos afirmativos de Vamos Juntos, el Partido Socialista, RU y la UCR y 27 votos en contra del Frente de Todos, el Frente de Izquierda y La Libertad Avanza.
La iniciativa conocida como “Nada es Gratis” busca explicitar que las decisiones de gobierno las financian los contribuyentes y será de aplicación para todos los medios de difusión oficial en cualquier soporte que utilicen.
Kienast manifestó: “Lo que buscamos con este proyecto es lograr una mayor transparencia en los discursos políticos. Cuando desde cualquier cartera política se anuncia que un bien o servicio es gratis, se debe aclarar que es financiado con el dinero de los contribuyentes”.
Y agregó: “El ciudadano tiene que saber que el Estado por sí mismo no es proveedor de nada, porque el Estado por sí solo no es capaz de generar riqueza alguna. Además, la ‘caja’ estatal no es infinita y solo existe porque los ciudadanos aportan para que exista”.